El Museo del Vidrio y Cristal de Málaga se distingue por ser pet friendly, aunque la mascota deberá ir atada y controlada por su dueño, dada la delicadeza de la exposición del museo. Allí encontraréis a Carlitos, un boxer, el dueño peludo del museo.

La colección se encuentra situada en una casona del S.XVIII, cuidadosamente restaurada, donde podemos recorrer la historia de la humanidad a través del cristal. Se trata de una colección privada, formada por unas 2.000 piezas de cristal de diversas épocas, acompañada por una importante representación de obra pictórica, mobiliario y objetos de decoración que corresponden fielmente a cada periodo histórico al que representan, creando un ambiente que nos sumerge en el verdadero contexto doméstico en que vivieron sus primeros propietarios. Un museo de artes decorativas que quiere ser una entidad viva que sirva de aliciente para rehabilitar el antiguo barrio artesano de San Felipe Neri, y un núcleo de referencia y estudio para los artesanos modernos.

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Málaga, España